31-5-2009 21:00
Lo increíble ha sucedido. Después de una aciaga temporada, luego de varios cambios de entrenador, de jornadas de mala suerte, penaltis injustos, tácticas equivocadas, y a pesar de tener a un vasco de presidente de la Federación Española de fútbol, Osasuna y Athletic han descendido a segunda, a la liga Adelante, que paradójicamente, en el caso de esos equipos es Atrás. La tristeza es la nota dominante en toda Navarra y sobre todo en Bizkaia donde es la primera vez que pasa esto en más de un siglo. Más de un infarto se ha llevado por delante a algún aficionado, y los leones vienen derrotados de Valencia mientras a los rojos navarros, el Real Madrid les ha endosado una última goleada que no les ha servido para ganar la Liga. Pero hacía semanas que se veía venir y el desanimo era la única bandera que ondeaba en las 4 capitales vascas. Queda mucho por hacer.
De nada sirvió el recambio de entrenador antes de navidad en ambos casos, ni algunos puntos regalados por equipos amigos, y todo un País que se presume de Primera, tiene a los cuatro equipos en segunda porque ni Alavés ni Real Sociedad han conseguido subir a la división que bilbaínos y navarros abandonan. La temporada que viene se oirán cantos de sirena, se apelará a esa casta que estos meses ha estado ausente, y se rezarán plegarias para la vuelta a la división BBVA. Resulta cuando menos doloroso que el gran patrocinador de las ligas sea el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, o sea, capital vasco en su mayoría, y que sea desde esos rascacielos desde donde se vea caer al infierno a equipos tan queridos.
En Bilbao se harán planteamientos peregrinos sobre la conveniencia o no de contratar jugadores de fuera de las fronteras vascas, de Burgos si es el caso, o de Belgrado si lo hubiera, pero se razonará que los otros tres equipos, con extranjeros desde hace mucho, también están descendidos, así que ahí no están todos los males. Más datos. Una población de casi dos millones y medio de personas tiene 4 equipos de fútbol punteros y los cuatro en segunda, y una población de 159.300 habitantes como Getafe tiene a uno en primera y con gran futuro. Y no vamos a hablar de presupuestos porque se nos suben los colores, con euros a tutiplén, fundaciones, ciudades deportivas, estadios gigantescos, jugadores con empresas boyantes, coches y casas para lucir, y un largo etcétera de despropósitos que habrá que replantearse.
Ahora se nos ocurren una serie de preguntas que tendrán su segunda parte en breve:
¿Se seguirán paseando con orgullo los colores de los equipos locales a pesar de estar en segunda?
¿Sabrán los jugadores de postín acoplarse a ese cementerio de elefantes que es esa división?
¿Seguirán los equipos recibiendo jugosas subvenciones por mor de mantener alto el prestigio y la dignidad de todo un pueblo?
¿Cambiarán las declaraciones en la tele, esas de «la verdad es que..», «no hay enemigo pequeño», «somos 11 contra 11», «el fútbol es así» y «yo de los árbitros no hablo»?
¿Volverán alguna vez a Primera, ya sean 1, 2, 3 o los 4?
PS: Esto está en categoría Ficción, y el blog se llama Eztabai, de Eztabaida, Discusión.