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Eutsi gogor!
PS: Aunque algunos digan como el obispo Munilla: «Quizá es un mal más grande el que nosotros estamos padeciendo (nuestra pobre situación espiritual), que el que esos inocentes están sufriendo». Abre por primera vez la boca y ya queda retratado. Bingo!
ACTUALIZACIÓN
Un artículo de Iñaki Berasaluce que explica que Haiti sea pobre y su vecina República Dominicana relativamente rica
EL título del post genial, ¡no nos damos cuenta de nuestra fragilidad hasta que mamá se enfada!
Y con respecto a la famosa frase…¡sin comentarios! Algunos calladitos lo parecen, pero cuando abren la boca confirman lo que nos temíamos.
Felicidades por tu espacio
Quizá nos recuerde que somos frágiles… o la injusta situación del país más pobre de América, ya antes del terremoto.
Gracias María, tu blog también me encanta y me tendrás de asiduo.
Iñaki, si pasa algo de esa magnitud en Japón habría habido destrucción pero mucho menor que la que se da en edificios e infraestructuras en precario, tienes razón. Pero eso sí, mamá cabreada y ni Los Angeles que espera el Big One y parece preparado, podría aguantar. Mamá es mucha mamá.
o nos recuerda q somos igual de animales…Mxk
¡La pacha mama y su puta madre!
O cómo nos gusta explicar la fatalidad y tratar de ponerle significado a todo…